La laguna de Pacucha
Cierto día se había realizado un matrimonio en el cual sólo asistió gente adinerada del pueblo, es entonces que apareció un anciano harapiento, aparentemente era muy pobre; esta persona guardaba un cierto enigma pues los perros al detectar su presencia no le ladraron y fue así que ingresó a la fiesta.
La gente se extraño preguntándose:
- ¿Por qué los perros no muerden a ese viejo apestoso?
Asi comentaron sorprendidos todos los invitados; fue entonces que salieron los padres de la novia y preguntaron:
- ¿Qué es lo que desea este viejo apestoso?, que se vaya a su casa, ¡sáquenlo!
Pero las personas que estaban en la reunión se extrañaron por su presencia, sobre todo al darse cuenta de que los perros no le ladrasen o mordiesen.
Los invitados se imaginaron: quizá sea Dios y en esa forma se presenta, pero algunos no hicieron caso ante la extrañeza de los demás,
-¡Que no ingrese!, ¡que no ingrese!
Decía la novia, el novio mencionó lo mismo.
Fue entonces que el anciano no ingresó a la fiesta de matrimonio y se fue, continuó su camino y se alejó de aquel lugar, de pronto ingresó a una casa donde una señora estaba moliendo máchica, la señora cargaba a su bebé a la vez que molía, fue entonces que el hombre le dijo:
- ¿Puedo ingresar?,
La señora le dijo que pase adelante, que tomara asiento, para ello le ofreció un cuero de oveja a fin de que no se ensuciase; a la vez le convidó un poco de su máchica en un plato,
- ¡Sírvase!-
Le dijo, con un poco de agua pasará mejor, esta máchica es lo único que puedo ofrecerle,
- Gracias!
Le dijo el anciano, pero no la probó, sólo la olió,
- ¿Podrías regalarme aquella flor que tienes a tu costado?
- Le dijo el anciano, luego quiero que alistes enseguida tus cosas para tu cocaví (provisiones), que cargues a tu bebé y que partas, fue entonces que la dejó en un lugar alejado del pueblo, de ahí le dijo que se fuera a la parte más alta del cerro y que no mirase atrás a pesar de que escuche algún ruido en el pueblo pues si lo hiciese se iba a convertir en piedra, pero la señora no le hizo caso, fue el ruido y la curiosidad la que le hizo voltear y mirar hacia el pueblo, aquel ruido era el terremoto que había mandado el anciano, el agua se desbordó y fue así que se formó una laguna, la señora junto a su bebé y la oveja se convirtieron en piedra; el causante de que la laguna ahogara a todo el pueblo fue Dios quien fue al pueblo a realizar una prueba.
Todo era en realidad una prueba.xxxxxx